martes, 2 de octubre de 2012

La innovación del talento humano

Las diversas culturas que existen dentro de una organización, hablan más allá del conocimiento sobre el talento humano en la empresa, si lo enfocamos a los procesos tradicionales de la evaluación del desempeño, mejorando el clima laboral, desarrollando al talento con mayor adiestramiento externo, y hacer de la idea innovadora mensajes subliminales considerados en la Misión y la Visión de la empresa, sentimos que nuestra cultura tiene un arte sagrado y ancestral asociada a una familia con linaje. No deseo entrar en la lirica del modernismo, cuando sabemos, que todo el mundo se acciona mediante la libertad de ideas e innovaciones, de tal forma que cada individuo maneja a su antojo la fórmula del éxito, con su propia Misión y Visión interna; y es que acaso no somos capaces de preguntarle al individuo, ¿cuál es su Cultura Organizacional en su vida?, ¿cómo es su plan de evaluación?, ¿cómo podría mejorar su clima interno de ánimo, actitud y adiestramiento?, ¿Qué tiene planificado estratégicamente para su vida?.

Recordemos que siempre alguien en toda nuestra experiencia laboral, nos muestra una innovación creada con estrategias que en resumen termina siendo colgada en la pared, enorgulleciendo solo a las instituciones y un saludo a la bandera cuando desconocemos el fin de sus objetivos, hoy en día, las empresas muestran su metas y retos refiriéndolas a sus objetivos trazados en la Misión y la Visión, y no es cierto que cada vez más personas no logran creerse aquellas frases como “Somos una empresa dedicada a…..” y nuestros objetivos es ser reconocidos como tal. Yo me pregunto: ¿Qué hace a una familia “grande”? No es por el merito al esfuerzo de sus propios integrantes, entonces porque cuesta mucho entender que la innovación del talento humano se inicia por lo que deseamos crear, de implantar nuevas ideas, además con valores agregados que muchas veces nacieron de nuestras propias experiencias en la vida.

Hoy en día, las grandes economías del mundo sino están saturadas, pueden estar en una gran recesión, pero, estas grandes economías en algún momento de su apertura o inicio obtuvieron grandes ideas que forjaron un capitalismo sobrio, hoy en día la mayoría casi ya no funcionan, las bolsas mundiales se derrumban, el mercado internacional está copado, todo hoy en día se volvió a una simple transacción, “Desarrollo del Consumo Barato”, hoy en día las ideas radicales están obsoletas, es como el gran metal que fue forjado alguna vez y que el oxido moderno las corroe hasta desintegrarlo, y que al final termina por destruir aquella revolución industrial, dejando solo enormes cimientos y estructuras abandonadas.

Debemos comenzar mover un cambio y no solo de personas, sino que cada talento humano pueda desarrollar y mejorar su propia función, una oportunidad de cambio, ya no somos aquellos trabajadores de hace 20 o 30 años atrás, esa generación termino su ciclo laboral y parte de los procesos de trabajo se fueron con ellos, y como es ilógico se vuelven chatarras en un basurero de pensamientos y procedimientos esperando a ser fundidos, pero aun así, solo podemos rescatar aquellos valores que una vez fueron formados, y que nos enseñan lo importante que puede ser una formación del pasado, del presente y de lo que necesitamos hacer o mejorar hoy, para el futuro.

Piensa un momento y recuerda como te alimentaste en el pasado, como esta en el presente tu formación de valores, nadie acepta un cambio si no se lo propone, tomar nuestras ideas para nuevamente encaminarlas hacia el paso del cambio. El talento humano sigue dormido entre formulas del siglo pasado, entre analfabetos y léxicos modernos que confunden a nuestros grandes letrados del pasado, entre una administración pública que mi abuelo conoció y yo la sigo usando. Hasta las figuras de los Legos con lo que juegan mis sobrinos y que algún día jugué yo, de seguro cambiaron de formas, lo único que no cambia es aquella razón para seguir destruyendo el criterio intelectual, entonces, ¿por donde comenzamos?, por reiniciar el sistema, o por comenzar a reinventar mejores prácticas, el talento humano es innovador, y lo innovador necesita de un nuevo ambiente.

Betiko.