Capítulo 3 – Publicación 7
¿Qué logramos con ser prácticos en la vida?
- ¿Ayuda usted a grupos de trabajo
frecuentemente? –
- ¿Somos grandes
innovadores? -
- ¿Desarrollamos nuestras habilidades? -
- ¿Aplica racionalmente su criterio? -
Quizás
la mayoría de veces nos hacen estas preguntas, pero quienes realmente se hacen estas
preguntas así mismo, es porque buscan estar comprometidos con su voluntad de
crecer y hacer crecer a los demás, también es frecuente ver que existan
reuniones para condecorar, felicitar o premiar a personas que por su esfuerzo
son útiles a su empresa y hacia los demás.
Si somos
de aquellas personas que regularmente nos preguntamos así mismo: -¿si somos lo
verdaderamente útiles para sí y los demás?- el gran problema que encontraremos,
es que en nuestra sociedad existe mucho la “dependencia”, vivimos pensando en que otros
deben solucionar nuestros problemas o las grandes dificultades que se presentan
en nuestras actividades diarias, además encontraremos diversas justificaciones
para evitar las responsabilidades, tales como: “para eso fueron contratados” o quizás
piense que: “por eso tienen buenos salarios y una buena posición”, si reconoce
que esto sucede en usted, entonces, volvamos a las preguntas que se encuentran al
inicio de nuestro capitulo y sabremos cuán comprometido se encuentra usted.
Ya
sabemos que la dependencia nos encuadra en una serie de limitaciones y rutinas
que el único fin al que nos esforzamos es cumplir con nuestro trabajo para
obtener la paga y resolver nuestras responsabilidades familiares o personales;
Muy común en la mayoría de personas.
El
ser útil a los demás nos da la posibilidad de poder descubrir más allá terrenos
que debemos comenzar a explorar, de esta manera alimentaremos nuestra capacidad
y corregiremos actitudes de cómo afrontar retos, pero también no solo seremos
receptores de un cambio personal, esto debería ir también en beneficio de los
que nos rodean.
El
ser útil no está abocado a ser piezas de resultados, sino que, el ser útil
también debe ser dirigido a aquellas personas que buscan ser útiles, que desean
ser orientados y busquen su bienestar personal. Nuestra tarea es también la de
ser educadores del cambio, si reclutamos más personas a este ejercito del
cambio habremos desechado nuestra dependencia.
«El hombre más perfecto es el que es más útil a
los demás».
MAHOMA
© 2016 Copyright by Alberto Lamilla.