Punto de Vista -
View Point
Capítulo 4 – Publicación 5
El Gerente
General vs. La Empresa
“La cabeza por su importancia está
en lo alto y es vigilante para la seguridad e integridad del cuerpo”
La historia siempre me recuerda que
el mejor ejemplo de éxito está en su orden, y cuando mencionamos el ORDEN, únicamente
no se establece por lo material, puede encontrarse en las ideas, en el trabajo,
en la suficiente autoridad para poder delegar y dedicarse a lo que su función
lo requiere. Un gerente general en la teoría es un término descriptivo para
ciertos ejecutivos en una operación de negocios. Es también un título formal
para ciertos ejecutivos de negocios, aunque las labores de un gerente general
varían según la industria en la que se desarrolle la empresa.
Visto de esa forma, y nuevamente la
historia me recuerda que la teoría resulta muy distinta a la práctica, las
funciones de muchos gerentes generales resulta llevados a una balanza y que éste
hecho justifica que cada “balance” represente un porcentaje en el peso de sus
responsabilidades. Es decir que nuestro GG tiene a su cargo las
responsabilidades por las operaciones del negocio, el cual supervisa y toma
decisiones en base a la producción o la venta del producto o captación de
nuevos clientes, y que a su vez termina por mejorar las utilidades, los pasivos
y activos de la empresa; Básicamente esto es una regla de orden para lo cual
nada es nuevo en los retos u objetivos de la organización.
En mi posición y en lo personal he
podido analizar a cada individuo que se asume una Gerencia General, bajo muchos
puntos de vista, he visto profesionales de Marketing asumir la GG, Ingenieros,
Economistas, Contadores, Retirados de las Fuerzas Armadas y algunos que no son
profesionales, pero cada uno de ellos tienen una forma distinta de gerenciar y
muchos de ellos tienen un parecido a las habilidades de un jugador de futbol,
en resumen muy pocos son diestros para dominar el balón con las dos piernas. El
Gerente General tampoco es un ser superdotado intelectualmente pero formado académicamente
para sobresalir en el pie que mejor domina.
Las empresas de acuerdo a la
industria o actividad que desarrolle optan por ser un cazador y como aguja en
el pajar encontrar al mejor talento para que asuma el cargo de GG. Pero las empresas requieren también
de un talento adicional de cual no solamente se encargue del negocio, sino que la
parte “administrativa” sea el empuje que requiere el mismo negocio. En el
negocio no existen alianzas o pactos, no existen guardaespaldas, no hay tiempo
para mirar el beneficio propio, solo el crecimiento seguro y sostenible.
La experiencia también me recuerda
que los tiempos de los “Negocios” son cortos y que solo perduran aquellos que están
reservados a la actividad de los “Servicios”, los cuales no necesitan de mucho
peso creativo en sus procesos de desarrollo organizacional sino en su
excelencia operacional.
Hoy en día un GG que se dedique únicamente
a estar pendiente por los temas administrativos de la empresa, no es un buen
GG, el negocio necesita de representantes
que estén tocando puertas, ofreciendo productos, atraer clientes, de tener la
misma idea, voz, pensamiento con sus pares o gerentes de segunda línea, demostrando
que la cabeza sigue siendo la misma hasta el último nivel de la empresa logrará
tener éxito y orden pero aquella organización que año a año justifique sus pérdidas
está llena de personas que solo desean tener asegurado su salario cada mes y
calentar el asiento sin importar lo que le suceda a la organización.
Muchos son los llamados y pocos lo elegidos.
© 2018 Copyright by Alberto Lamilla.
Contáctame a: albertolamilla@gmail.com
