¿Qué logramos
con ser prácticos en la vida?
De no agobiarnos por problemas
En
nuestra vida cotidiana siempre estamos expuestos a encontrarnos con problemas
personales, laborales o familiares, usted se da cuenta que siempre cuando se
nos presenta este tipo de problemas sentimos un gran fastidio, pero no se da
cuenta que cada vez nos fastidiamos por cualquier cosa, el carácter va tomando
una cierta posición en usted que no es el conveniente, es como que usted tomase
pastillas para adelgazar y cada vez que las toma va reduciendo su capacidad
corporal y sin darse cuenta pone en riesgo su salud, me explico: si usted deja
que sus problemas lo vaya consumiendo poco a poco, esto lo irá mortificando de
tal forma que usted va ir reduciendo su actitud positiva, poniendo en riesgo su
personalidad. El ser prácticos no admite que podamos agobiarnos, ni ahogarnos
en un recipiente con agua, el ser prácticos nos dice que los problemas solo son
circunstancias de la vida y estos son reemplazables de tal forma que cuando se
vuelva a presentar, lo primero que nuestro consciente diga es: «hay que
solucionarlo» y evitar ingerir más actitudes negativas.
En
nuestra sociedad, que puede ser la suya, pueden darse miles y miles de
problemas, y sabe usted que esto no puede afectarlo, pero sabe también que lo
expone a muchos riesgos, yo le digo: «si viviéramos más de mil años le aseguro
que hemos vivido lo suficiente para conocer mucho más», porque cada
circunstancia en la vida es una prueba de nuestra capacidad e intelecto, mucho
nos agobiamos y perjudicamos nuestra calidad de vida y al hacerlo solo vivimos
dentro de las circunstancias que nuestro entorno no va presentando, sin
encontrar solución alguna, por ende nos enredaremos más en ellas.
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¿Qué es vivir dentro de las circunstancias? -
Es
convivir con los problemas, es ser absorbido y manipulados por ellos con el fin
de destruir y destruirnos.
En
nuestro entorno laboral cuando en ocasiones los negocios están influidos por
situaciones coyunturales y la economía se resiente o se contrae, sabemos que
esta es una oportunidad por mejorar o reforzar nuestro plan estratégico, de tal
forma que al reactivarse la economía encuentre a una organización sólida y con
mayores opciones para recuperar terreno.
Pero,
si los ejecutivos solo piensan en ver números, esperando que las oportunidades
vengan a tocar su puerta, terminarán por cerrar sus operaciones o reducirlas a
la mínima expresión sin poder de competencia en el futuro.
Las
informalidades en el trabajo, el desconocimiento de los planes estratégicos,
los distintos comportamientos de los ejecutivos, van desfigurando la intensión
de implantar un mejor clima laboral, imagine entonces si nos agobiamos en
nuestro propio entorno (interno) como terminaría el agobio en el mismo centro
laboral cuando los problemas no pueden ser resueltos por sus propios
ejecutivos.
El
no agobiarnos libera la tensión de la preocupación, las interferencias internas
desgasta y desperdicia nuestro tiempo y esfuerzo dedicados hasta por varios
años en nuestra labor, que al final se resume en la falta de reconocimientos y
que muchos lo atribuyen a un mal clima laboral.
«El
irritarse por las cosas que acontecen es divorciarse de la naturaleza».
Marco Aurelio (Filósofo)
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